SOLO SE VIVE UNA VEZ; ¿QUÉ MEJOR MANERA DE APROVECHARLA QUE INTENTAR AVERIGUAR EN LA MEDIDA DE LO POSIBLE DE QUE COJONES VA TODO ESTO DE LA EXISTENCIA Y LA REALIDAD DE LA QUE SE COMPONE?.

martes, 30 de abril de 2013

SOBRE CÓMO AFECTAN EN LAS SOCIEDADES HUMANAS LOS AVANCES TECNOLÓGICOS EN LOS SISTEMAS PRODUCTIVOS, DE TRANSFORMACIÓN, DE GESTIÓN, LUCRO, ETC... (DE TODO TIPO DE BIENES DE CONSUMO).

    He decidido escribir esta entrada, a pesar del poco tiempo que tengo, a raíz de un debate entre una amiga y un servidor, creado en la sobremesa de una cena entre amigos.
No era el momento ni el entorno adecuado para una pretensión tan ambiciosa como a la que yo aspiraba en aquel momento, puesto que el asunto requiere un análisis sosegado y minucioso.

    El tema de debate trataba de si benefician o perjudican a una sociedad los adelantos tecnológicos. Si crean bienestar, o por el contrario, la tecnología elimina empleo creando desigualdad y en consecuencia más pobreza.
    Pretendí explicar mi postura y argumentos mediante un ejemplo ideal, a lo que ella me interrumpió enseguida alegando que no es acorde con la situación real a la que nos estábamos refiriendo.

    Antes de empezar quiero defender los ejemplos ideales como herramienta válida para argumentar conclusiones fiables.
    Pienso que los ejemplos ideales tienen el cometido de seleccionar en un análisis los agentes que consideramos fundamentales y desechar los que consideramos de influencia despreciable, simplificando así el análisis en pro de una mayor eficiencia.

    También creo que los ejemplos ideales deben ser lo más elementales posible. Incluso, si es posible, simplificarlos a un solo agente de influencia; tomando todos los ejemplos ideales necesarios para abarcar a todos los distintos agentes de influencia que consideremos fundamentales para un análisis global.
    Fundamento esto en la pureza de los análisis elementales, pureza válida como ladrillos o piezas elementales e inalterables con las que construir con solidez un análisis compuesto lo complejo que queramos sin perder este la consistencia de sus partes o componentes más elementales.

    Y finalmente, defiendo el método de los ejemplos ideales, siendo consciente de que no son un reflejo o interpretación exacta de la realidad, pero que las diferencias con esta, estriban en una influencia despreciable para los fines que se persiguen de agentes de la realidad que el ejemplo ideal pretende reflejar. Influencias despreciables para la precisión de las consecuencias o conclusiones que se pretenden.

    Por ejemplo: Podemos considerar como ejemplos ideales válidos, el asumir como de iguales propiedades a todos los electrones que componen un cuerpo humano, así como de iguales propiedades a todos los protones que componen un cuerpo humano, y de iguales propiedades a todos los neutrones que componen un mismo cuerpo humano.
    Lo podemos hacer porque las diferencias en propiedades intrínsecas de cada ejemplo (partícula) respecto a sus semejantes, son despreciables para definir las propiedades de dicho cuerpo humano hasta la precisión que necesitamos para demostrar la viabilidad como realidad, del sistema complejo que es un cuerpo humano mediante sus tres diferenciados componentes ideales (protones, neutrones, electrones).

    Paso al asunto que debatimos tan frustradamente en dicha sobremesa, para lo que construyo un ejemplo ideal:

    Tenemos una sociedad cerrada a la que llamaremos Soci (como lo es el planeta en su conjunto).
Soci tiene 100 elementos (habitantes, ciudadanos, o como queramos llamarlos).
    Los 100 elementos son agricultores (para simplificar el ejemplo es una sociedad vegetariana). Estos se reparten el tipo de alimentos que cultivan, de manera que un día a la semana se forma un mercado donde se intercambian los productos, con el fin de que todos accedan a alimentarse con la máxima variedad de alimentos diferentes y obtener una alimentación lo más completa posible.
    Estos agricultores generan o producen bienes de consumo con un valor capital de 10000 socis (por darle una identidad propia aunque abstracta a la riqueza que genera Soci); pero, para ver con claridad la economía real de gestión de la riqueza de Soci, no vamos a crear moneda alguna de cambio (soci no es una moneda de cambio, el intercambio de capital es directamente a través de los propios bienes de consumo). Cada agricultor produce 100 socis de capital alimento.

    Pero cuando enferma un elemento de Soci, nadie es capaz de enfrentarse a la enfermedad aplicando remedios que la palien en cierta medida y ni mucho menos la erradiquen.

    Vale, entonces pongamos a un médico naturista que recolecte las plantas medicinales y cure a los enfermos de la comunidad; siendo suficiente con un solo elemento de esta profesión para atender a la comunidad.

    Tenemos entonces a 99 agricultores y 1 curandero, con lo que los 99 agricultores tendrán que trabajar la misma cantidad de tierra de cultivos que antes 100 agricultores para producir el mismo capital de alimentos necesario que antes (el necesario para una sociedad de 100 elementos). Necesitarán entonces utilizar más tiempo de trabajo al día.

    El curandero intercambia capital de medicinas y tiempo de atención a los enfermos por capital de alimentos.
    Los agricultores trabajan algo más tiempo a cambio de poder tener cubierta su atención sanitaria. Es sin duda una mejora de calidad y bienestar de Soci como sociedad.

    Tampoco son ninguno expertos en albañilería, y necesitan casas en las que refugiarse de las inclemencias del tiempo y llevar una vida familiar privada.

    Necesitamos entonces a dos albañiles que extraigan de la naturaleza los materiales necesarios para construir las viviendas y almacenes de alimentos, y que sepan construir con ellos los edificios necesarios para cubrir la demanda de Soci.
    Estos, intercambian capital de materiales y de trabajo por capital de alimentos y en una muy pequeña parte, capital de sanidad.

    Pero para poder tener una vivienda y un almacén de alimentos, cada agricultor tendría que trabajar más tiempo al día el resto de su vida, pues tendrán que, entre menos agricultores, cultivar la misma cantidad de tierra de cultivo necesaria para una sociedad de 100 elementos de los que, ahora son 97 los agricultores.

    Podemos añadir un carpintero, un herrero, un artista de variedades, un juez, un alcalde, un policía, un cantinero y parar aquí por parar en algún momento, para mejorar el bienestar de Soci. Podríamos seguir añadiendo oficios, pero para el ejemplo es suficiente y hace un número redondo en agricultores (90) que es en el oficio en el que voy a centrar mis argumentos del debate en cuestión (los centro en los agricultores porque es el gremio más numeroso en el ejemplo, lo que hace más realista el ejemplo aún siendo un ejemplo de una sociedad de tan pocos elementos o ciudadanos).

    Así que finalmente tenemos:
90 agricultores
1 médico naturista
2 albañiles
1 carpintero
1 herrero
1 artista de variedades
1 juez
1 alcalde
1 policía
y1 cantinero

    Seguimos teniendo en total 100 elementos, de los que 90 son agricultores y tienen que trabajar la tierra necesaria para alimentar a 100 individuos (podríamos decir en vez de individuos, familias; pero entraríamos en la complicación de que pudiesen trabajar más de un elemento de cada familia, por lo que lo he simplificado a “elementos” como unidad abstracta de componentes de Soci).

    Para que el agricultor disponga de servicio médico, muebles y demás utensilios de madera, también herramientas y utensilios de hierro, una vivienda y un almacén, entretenimiento y un servicio de cantina para su tiempo de ocio, la tranquilidad de la seguridad ciudadana y la tranquilidad de la garantía del buen funcionamiento del sistema economicosocial de Soci que gestiona el alcalde, tiene que trabajar para producir un capital de 111 socis en alimentos; mientras que sin todos esos servicios y demás bienes de consumo complementarios a la alimentación, tenía que trabajar para producir 100 socis de capital en alimentos.
    Pero el aumento de tiempo de trabajo es asumible, quedándole tiempo para descansar y algo de ocio; por lo que obtiene una mejora resultante de su bienestar al acceder por el coste de 11 socis a todos esos servicios y bienes de consumo.

    Y ahora entramos en el fundamento de debate en cuestión.
    Resulta que existen en Soci los conocimientos, tecnología y materias primas suficientes como para construir tractores con una variedad de aperos y demás complementos, de manera que se pueden mecanizar en su mayoría los trabajos agrícolas, reduciendo enormemente el tiempo de trabajo.

    Para ello son necesarios, 1 extractor de mineral y fundidor para transformar la materia prima en aceros, 1 tornero diseñador mecánico, y 1 montador mecánico.
    Pero el capital de producción de este sector por unidad de tiempo es demasiado alto para que cada agricultor pueda acceder a la mecanización de su explotación agrícola de manera individual; con lo que forman todos (seguimos con un total de 100 elementos que componen Soci, con lo que extraemos los nuevos oficios de este nuevo sector a los 90 agricultores, quedándonos 87) una sociedad cooperativa agraria con un gestor presidente que también deja de ser agricultor, quedando 86 agricultores para trabajar mecanizadamente la misma tierra necesaria para producir el capital necesario de alimentos por unidad de tiempo como para abastecer a todos los elementos de Soci.
    Pero en este caso, es tanta la mejora en la eficacia y productividad del tiempo de trabajo que, aun siendo solo 86 los agricultores, ven necesario mucho menos tiempo de trabajo, quedándoles muuucho tiempo libre para ocio y lo que ellos quieran, mejorando substancialmente su calidad de vida.

    Démonos cuenta de que lo que intercambian no es capital de tiempo de trabajo, si no capital de bienes de consumo; y lo que ha habido es una mayor productividad de su capital de tiempo de trabajo en capital de bienes de consumo que son los que se intercambian en el sistema, con lo que son los que se valoran y capitalizan.

    Como no se necesita más capital de alimentos, no tiene sentido alguno cultivar más tierra para producir un exceso innecesario de alimentos que no van a poder intercambiar por otros bienes de consumo al no interesarle a nadie por verse cubiertas su necesidades alimentarias (esto, en la realidad, se ha perseguido incumplir desesperadamente haciendo a la sociedad altamente adictiva al consumismo, para lo que se ha recurrido a deslocalizar los sistemas productivos, crear bienes de consumo no perecederos con obsolescencia programada, y promoviendo irresponsablemente la concesión de préstamos al consumo, entre muchas otras medidas con una intención clara de huir hacia adelante para evitar el colapso del sistema). Esto les lleva necesariamente a la opción de reducir su tiempo de trabajo, siendo un trabajo de mayor valor capital, al obtener los mismos beneficios capitales por menos tiempo de trabajo.

    Este sistema nos lleva a la conclusión de que los adelantos y mejoras tecnológicos son beneficiosos para el buen funcionamiento de Soci y un aumento de su bienestar.

    Ni qué decir tiene que podemos sumar los gremios u oficios que queramos y mejorar tecnológicamente los gremios que queramos, todo ello siempre que respetemos y cumplamos la necesidad de cerrar todos los procesos o ciclos que abramos para construir una sociedad cada vez más completa y realista. No olvidemos que Soci es un sistema global cerrado como lo es nuestro planeta.

    Pero... ¿y si Soci no estuviese equitativamente distribuido en su capital patrimonial de tierras de cultivo?.

    Modifiquemos el ejemplo ideal en este asunto.
    En este nuevo ejemplo, todo es igual salvo la distribución de la tierra; de manera que toda la tierra de cultivo es patrimonio de 1 elemento, el cual se dedica como oficio a gestionar su trabajo. Trabajo a realizar por los 86 restantes agricultores.

    Primeramente situémonos en un Soci sin la tecnología suficiente como para construir tractores; un Soci inicial.
    Aquí hay un cambio fundamental a tener en cuenta. Estos agricultores no ofrecen para intercambiar capital en alimentos, si no, capital en tiempo de trabajo; lo que en principio no tiene que cambiar mucho el resultado.
    Si bien son uno menos para trabajar las mismas necesarias tierras de cultivo, por otro lado no tienen que ocupar de su tiempo en tomar decisiones de gestión de trabajo; pues de esto se encarga el dueño, y gestor (el empresario).
    Y respecto al mercado de Soci, tampoco genera el cambio consecuencias apreciables; pues los agricultores (empleados) intercambian capital de tiempo de trabajo por algunos menos socis de valor capital en alimentos del dueño de las tierras, diferencia correspondiente al capital de su tiempo de trabajo de gestión más capital de rendimiento patrimonial de sus tierras de cultivo.

    Estos agricultores por cuenta ajena (en el ejemplo inicial lo eran por cuenta propia) adquieren algo menos capital, pero el suficiente como para acceder a suficientes bienes de consumo como para considerarse satisfechos en bienestar social y calidad de vida en comparación al resto de elementos de Soci.

    El problema viene al dotar a Soci de los conocimientos, tecnología y materias primas necesarios para fabricar tractores con sus aperos y demás complementos necesarios para mecanizar en su mayoría las labores agrícolas.

    Como es el dueño de las tierras y gestor el que decide adquirir la maquinaria, lo hace con la intención legítima de, con ello, mejorar su calidad de vida, siendo su capital el que arriesga. Y no tiene sentido que acceda a esta mejora tecnológica en el trabajo para que los beneficios de dicha inversión vayan a la revalorización del tiempo de trabajo de sus empleados.

    O sea, que si lo hace es para seguir pagando el tiempo de trabajo de sus empleados con el mismo capital en alimentos por unidad de tiempo de trabajo que antes de invertir en tecnología.
    Pero como Soci es un sistema cerrado (en última instancia lo podemos asemejar a la sociedad del planeta entero), ni hay más tierra cultivable, ni se necesita más capital en alimentos; con lo que ahora sobra mucho capital de tiempo de trabajo agrícola en el sistema. Y, a diferencia de la versión inicial de cooperativa agrícola, en esta versión, el agricultor empleado capitaliza para intercambio tiempo de trabajo. Y como se necesita mucho menos tiempo de trabajo, o prescinde el empresario de empleados o les reduce considerablemente el tiempo de trabajo.

    En el primer caso, los adelantos tecnológicos han sustituido a elementos de Soci quedándose estos completamente descapitalizados y cayendo de inmediato en la más completa pobreza y total falta de bienestar alguno, sin acceso a ningún bien de consumo; ni siquiera el más elemental, el alimento.
    Para estos elementos de Soci, la transformación a sido rotundamente negativa y resulta un agente de creación de desigualdad del sistema, llevándolo a una cada vez mayor desestabilización (al no poder los empleados despedidos consumir alimentos y demás bienes de consumo, también se necesitan menos bienes de consumo al no poder una parte de los elementos de Soci adquirirlos y el equilibrio del ciclo de intercambio de capital se rompe derivando a un colapso).

    En el segundo caso es todo el sector el que pierde buena parte de su capital socis de tiempo de trabajo al ser sustituido por la mecanización que ofrece la mejora tecnológica. Y si bien todos pueden adquirir un capital escaso en alimentos, este capital es de tan pocos socis que se reduce substancialmente su intercambio por otros servicios y bienes de consumo, eligiendo los más básicos, y componiendo una clase social sin el suficiente bienestar social y claramente diferenciada al resto de elementos satisfechos.

   Son muchos más que en el primer caso y, si bien, su descontento es menor, al ser más numeroso afectan en cantidad similar en la inestabilidad del sistema Soci, ya que son la misma pérdida de capital total en capital de tiempo de trabajo (esto nos lleva más o menos al mismo colapso, pues se retira de la circulación el mismo capital igualmente necesario para completar el ciclo, si bien deriva de manera más homogénea).

    Resumiendo... si la tecnología es para aumentar la productividad del tiempo de trabajo y en esa misma medida se revaloriza en capital la unidad de tiempo de trabajo, las mejoras de la tecnologías generan más tiempo libre en el empleado y (no lo olvidemos) consumidor, sin perder por ello poder adquisitivo como consumidor de bienes de consumo; con lo que las mejoras tecnológicas son beneficiosas para la sociedad (y el ciclo del capital de intercambio se sigue cumpliendo).

    Pero si la tecnología es para aumentar la productividad del tiempo de trabajo disminuyendo la cantidad de tiempo de trabajo por unidad de bien de consumo producido y sin revalorizar en la misma medida la capitalización de la unidad de trabajo, las mejoras de la tecnología generan menor poder adquisitivo de bienes de consumo para el empleado y consumidor, disminuyendo su nivel de vida y bienestar; con lo que las mejoras tecnológicas son perjudiciales para la sociedad.

    Pienso que se da en mayor medida el caso en el que no se revaloriza el valor capital del tiempo de trabajo suficientemente como para compensar la pérdida de tiempo de trabajo ocasionada por la aplicación de las mejoras tecnológicas; ni se ha reducido el tiempo de trabajo consecuentemente, también en la medida suficiente.
    Y que el ciclo del capital nunca ha llegado a completarse a nivel planetario debido a una falta de organismos globales de gestión , control, supervisión e impositores de normas garantes de la compensación en bienestar de la humanidad a cambio de la aplicación de las mejoras tecnológicas que, por el contrario, nos han llevado a este esquizofrénico consumismo acelerado que solo nos puede llevar a la destrucción de la cada vez menor estabilidad que posee este, enfermo desde sus inicios, sistema.

    El equilibrio de un sistema socioeconómico sostenible puede tener, y en el caso de nuestra sociedad, tiene, varios agentes fundamentales de influencia en la sostenibilidad de su equilibrio dinámico. Y el que he tratado en esta entrada solo es uno de ellos; no reflejando por sí solo la realidad de algo tan complejo.

    Pero creo que es relevante entender estos agentes de influencia y la evidencia lógica de que el que pretende buscar mecanismo para eludir su influencia, solo está engañándonos a los no entendidos que solo pedimos de nuestros gestores gobernantes que nos lo den todo hecho, sin buscar rendir cuentas y mucho menos molestarnos en intentar entenderla. O, como mínimo, está engañándose a sí mismo. ¡Qué coño...! o ni siquiera eso. Es muy probable que solo sea un listillo sinvergüenza sin principios y mucha ambición; lo que abunda mucho en nuestra cultura individualista.

    En realidad, lo único que pueden conseguir, y lo saben, es posponer las consecuencias del desequilibrio ocasionado al no tener en cuenta las consecuencias de sus medidas y decisiones en estos agentes de influencia, de manera que salvan el equilibrio presente a costa de condenar, hacia un desequilibrio mayor y menos recuperable, el futuro. O en vez de deslocalizar el problema y sus consecuencias en el tiempo, las deslocalizan en el espacio; de manera que mantienen el equilibrio en una zona o subgrupo de sistema a costa de desequilibrar mucho más otra o otras zonas o subgrupos. O ambas cosas conjuntamente; pues todo es poco e insuficiente.

    La cuestión es que las injusticias y desigualdades socioeconómicas, son la consecuencia visible como proceso de huida hacia adelante; bien como desigualdad en el tiempo, entre generaciones, o bien como desigualdad en el espacio, entre estados diferenciados, estratos sociales, culturas, razas, etc..., o ambos tipos de desigualdades.

    Y para colmo, estas consecuencias visibles solo son consecuencia de una pala estructuración del control del Sistema, en pro del beneficio de unos pocos privilegiados en el sistema, y a costa de que , finalmente y muy a nuestro pesar, sea inevitable el colapso del sistema; pues, ninguna de esas medidas, lo son para enmendar y recuperar el equilibrio del sistema y sus sostenibilidad estructural.

 Os aconsejo ver el reportaje de tve de hace m,as de un año "La crisis de Europa y el fin del Euro" , y el original "E l desencanto de Europa".